Por Sonia Insaurralde
Con una numerosa y entusiasta asistencia, tuvo lugar la Jornada clínica “La práctica analítica en las instituciones de salud” el día sábado 7 de septiembre en la EOL Sección La Plata. La misma dio cuenta del valor de acontecimiento de estos encuentros.
La jornada contó con ocho presentaciones de casos clínicos, divididos en tres mesas, la primera mesa coordinada por Cecilia Fasano quien realizó la apertura de la misma, la segunda fue coordinada por Valeria Martínez y la tercera estuvo a cargo de Marisol Gutiérrez quien realizó el cierre de la Jornada.
Inicia la jornada Cecilia Fasano, quien coordinará las tres primeras presentaciones. Allí agradece la concurrida presencia, al Directorio y a todos los que participaron de la organización y presentación de casos. Menciona que el hospital es una institución compleja, en ocasiones toma el modo de la Torre de Babel pero que, aun así, la presencia de analistas no solo hace existir el psicoanálisis, sino que ratifica cotidianamente su eficacia.
La primera mesa, con Agustina Wasserman, practicante en el Hospital Rossi, presenta su trabajo titulado “Del grito al llamado”, y el comentario estuvo a cargo de Virginia Baroli. Aquí se conversó sobre la función del deseo analista, aquel que no responde a un saber, pero que se desprende de la experiencia. A su vez, se ponderó que frente a la urgencia, la analista pone una pausa para hacer entrar eso que rechaza un decir y darle lugar al sujeto.
La segunda presentación estuvo a cargo de Natalia Cejas con su trabajo titulado “Amanda”, quien compartió su práctica en el Hospital Reencuentro. El comentario fue realizado por Christian Martin. Aquí surgió la pregunta acerca de cómo se sostiene el discurso analítico en el hospital con la complejidad de ciertas presentaciones y el lazo con otros actores institucionales. Si bien no hay una única respuesta, se resaltó la transferencia de trabajo. Por su parte, la analista destaca el uso de la vacilación calculada de la neutralidad, que le permitió mostrarse interesada, pero no escandalizada y así introducir algo distinto en el devenir del sujeto.
A continuación, la mesa es presentada por Gisela Delgado Guidi con su trabajo “Vacío de hombre”, practicante del CAPS N° 27. El comentario estuvo a cargo de Soledad Salvaré. Se destacó la particularidad de un Centro primario de la salud y sus diferencias con el hospital como institución. Se conversa sobre la analista como partenaire de la urgencia del sujeto, a partir de hacer una excepción, corriéndose del para todos del discurso amo institucional. Esto sólo fue posible a partir de estar ubicada en el discurso analítico, dando lugar al no-todo. La segunda mesa se inicia con la coordinación de Valeria Martínez, quien da lugar a la presentación de Constanza Collante y su trabajo titulado “Cura marcial”, producto de su práctica en el Hospital Rossi. Lorena Parra estuvo a cargo del comentario.
En ésta mesa se conversó sobre la importancia de hacer uso de los recursos institucionales como puede ser una internación, posibilitando alojar lo singular. La orientación por lo real permite situar el síntoma del sujeto y sus recursos para apaciguar el malestar, sin perderse en los síntomas situados por el discurso médico.
La Jornada continua con la mesa presentada en dupla a cargo deMilagros Dettbarn y Santiago Moltedo con el trabajo llamado “Un dolor inagotable”. Ambos ejercen su práctica en el Hospital San Juan de Dios. El comentario fue realizado por Stella López.
Aquí el psiquiatra Santiago Moltedo, dio cuenta de la intersección de los discursos tanto médico, como psicoanalítico y psiquiátrico. La complejidad del caso daba cuenta de un dolor que hacía pregunta, pero que no podía ser reducido al organismo, sino pensar al cuerpo impactado por las incidencias del lenguaje. A su vez se destacó la importancia del control.
Luego de un break, continúa la Jornada con la tercera mesa coordinada por Marisol Gutiérrez y presentada por la dupla de Nahuel De Dominicis y Joaquín Cereijo con el trabajo titulado “Alicia en el país de las pesadillas”. Ambos realizan su práctica en el Hospital Rossi. Paula Lagunas es quien realizó el comentario del trabajo.
En ésta mesa se conversó sobre la importancia de la función del practicante quien, frente al padecimiento del sujeto, rescata un recurso frente al mismo. A su vez, el psiquiatra Joaquín Cereijo pudo dar cuenta de qué lugar tenía el tratamiento farmacológico en la paciente, para no entrar en serie con el discurso del amo. La conversación dio cuenta de que fue posible el trabajo conjunto maniobrando con los discursos en juego, no sólo los de la institución sino de la paciente misma.
La siguiente presentación fue realizada por Romina Trejo junto a la psiquiatra Danielle Bahls con su trabajo “Un cuerpo que habla y una adolescente que también lo hace”, producto de la práctica en el Hospital de Niños. A su vez, realiza el comentario Gabriel Tanevitch.
La conversación resaltó la presencia de lo que podemos llamar “casos raros” como parte de las presentaciones actuales pero que, si bien es importante el diagnóstico para orientarse, éste se da bajo transferencia. A su vez, se conversa acerca del cuerpo que habla, pero que sólo se sostiene si hay un analista que lo escuche y pueda delimitar de qué cuerpo se trata.
Por último, se da lugar a la presentación de Julieta Eliggi, con su trabajo “Y”, practicante del Hospital Rossi. Yasmina Romano fue quien realizó el comentario del trabajo.
Durante la mesa se debatió acerca de la urgencia subjetiva y las diferentes demandas involucradas, recordando a Lacan quien advierte no responder a la demanda, sino interpretarla. A su vez, se subrayó la importancia del encuentro con una analista, quien valida el recurso del diagnóstico que arma el mismo sujeto, para hacerle frente al goce que lo invade del Otro.
Marisol Gutiérrez realiza el cierre de la Jornada haciendo mención a la novedad de la invitación a dialogar con psiquiatras en la Sección y la importancia de la presencia de los analistas en los servicios de salud, que se espera sean motivo de próximos encuentros de trabajo.