Miércoles 14 de Julio de 2021, 20:00 hs.
El miércoles 14 de julio se dio lugar, ante un auditorio virtual de alrededor de cien personas, a la Segunda Noche de Carteles del año. Con las olas de mar como telón, recordando ese movimiento que propicia la intromisión de una materia extraña en el cuerpo del molusco, que luego devendrá perla -esa idea que la Secretaría de Carteles tomó como alegoría para el trabajo de este año- y una cita de Lacan que hicimos nuestra.
Stella López, con su amable coordinación, abrió la actividad para la cual se convocó a un cartel completo, inscripto hace casi dos años en el catálogo de carteles de la EOL, bajo el tema El cuerpo en la última enseñanza de Lacan. Compuesto por Maqui Piro, Valeria Martínez, Laura De Nucci, Fabiana Municoy, Claudia Forcinito y Mónica Boada como Más Uno, supo alojar la propuesta novedosa de exponer, no sus rasgos o su estado de trabajo, sino lo que podían producir a cerca de la transferencia recíproca en el cartel.
Así tres cartelizantes expusieron sus escritos, cada cual con su sesgo singular: Maqui Piro apuntó a la dimensión política de la transferencia de trabajo en el cartel, ¿para qué agruparnos? ¿Cómo establecer a partir de lo no colectivizable un lazo con otros? Valeria Martínez destacó el modo de transmisión particular que tiene la enseñanza del psicoanálisis por medio de la transferencia de trabajo: no basta con transferir los resultados, las conclusiones, los contenidos, sino que Lacan sostenía que ante todo quería transferir un estilo de trabajo. Destacó siguiendo a M. Bassols, que la transferencia no es nunca recíproca en la experiencia del análisis y que solo puede serlo en la experiencia de la Escuela, donde la transferencia recíproca debe incluir una crítica lo más seria posible, respetando la diferencia, la inconmensurabilidad (JAM dixit). En tercer lugar Laura De Nucci en su trabajo titulado Lazos con el saber, se preguntó qué lazo la ha unido a la Escuela antes de haber hecho la experiencia del cartel. Nombra a este lazo, frase retomada en la noche, como un tonto amor de transferencia, el cual cubría para ella el horror al saber. Contó su experiencia como cartelizante y que la ida y vuelta, del análisis al cartel, y del cartel al análisis le posibilitó un nuevo lazo a la Escuela y al saber.
Luego las otras tres integrantes del cartel compartieron su lectura una a una del trabajo de sus compañeras. Se destacaron los términos de inducción al trabajo, posición cartelizante, experiencia de cartel, el no-todo respecto al saber, así como varias preguntas, que junto con las de María Adela Pérez Duhalde, propiciaron una argumentada y fresca conversación.
Me quedo con estas frases productos de esa Noche:
- No es sin los otros que se tiene la chance lógica de producir algo diferente.
- El respeto con el otro nos sacaría de ese lugar imaginario de la reciprocidad.
- La transferencia recíproca no es la transferencia imaginaria, yo te supongo a ti lo que tú me supones a mí.
- La transferencia de trabajo es causar que el otro trabaje. Lo que se arma -o no- a partir de la inducción.
- La transferencia de trabajo es transferencia, por lo tanto está ligada al amor.
- La causa es el afecto, no lo epistémico. El amor a la causa analítica.
La noche se cierra con nuevas propuestas – ¿transferencias?- de trabajo y muchos agradecimientos.
Los trabajos completos presentados esta Segunda Noche de Carteles se podrán leer en el blog de la EOL Sección La Plata.
Yasmina Romano