Miércoles 26 de Junio 2024, 20:00 hs.
Por Matías Godoy
La primera Noche de Biblioteca de este año tuvo lugar el miércoles 26 de junio bajo el título: “Basta de tragedia. Basta de comedia. No hay drama”.
Al ingresar a la Sección nos sorprende encontrar la disposición de las sillas en una forma no tradicional. Despejado el centro de la sala, Lara Fichera toca su contrabajo y canta, invitando a los participantes a acompañarla. La anfitriona y coordinadora de la mesa es Cecilia Fasano (responsable de la Secretaria de Biblioteca) quien presenta a los invitados: Verónica Escudero (Asociada de la EOL Sección La Plata), Gabriela Basz (Miembro de la EOL y de la AMP) y Daniel Dalmaroni (Dramaturgo, Guionista, Director de teatro).
Cecilia comienza señalando la importancia de convocar invitados de otras disciplinas, para salir de nuestra jerga analítica y poner a prueba nuestros argumentos. Señala que para esta ocasión la obra escogida será la trilogía de Paul Claudel que Lacan trabaja en el Seminario 8, La transferencia. Allí interroga una curiosa expresión “lo trágico chocho”, formulación que encuentra su articulación con la tragicomedia.
Cecilia realiza una breve introducción a la trilogía de Claudel enfatizando los puntos clave y nodales de ellas.
Verónica Escudero comienza su ponencia haciendo mención a las dos «cuerdas» que utilizó para pensar su trabajo: la farsa y la banalización del trauma.
En la primera ubica aquello que Lacan va a situar a lo largo de esta trilogía bajo lo que denomina “el drama del deseo humano”, recordándonos que lo subversivo es la relación del hombre con el lenguaje.
A continuación, Verónica se interroga qué nos quiere señalar Lacan con esta «mitología» claudeliana. A lo que responde que de lo que se trata es del padre y de la emergencia de una descomposición caricatural del mismo, enfatizando lo femenino más allá del padre.
Para abordar la banalización del trauma, tomará el testimonio de pase Carolina Koretzky para señalar una intervención del analista cuando ella desplegaba la novela familiar. El impacto de esa intervención fue inolvidable en el punto en que despojó al relato de su banalización, constituyendo el trauma.
Por su parte, Gabriela Basz inicia su exposición aludiendo a la resonancia provocada por lo «trágico chocho», sugiriendo que esta expresión se encuentra implícita en el interrogante con el que Lacan aborda la trilogía.
Prosiguiendo su escrito, aborda la referencia de Lacan en torno al Edipo y la pérdida de su estrellato en una sociedad en donde el sentido de la tragedia se ausenta cada vez más.
Avanzando por ese hilo argumentativo, desglosa las tres versiones del Edipo para afirmar que en la trilogía se trata de la descomposición caricatural del Edipo, enfatizando que Lacan se sirve de la segunda y tercera versión para revelar el valor del significante en una dimensión poco abordada por él hasta ese momento.
Retorna a Lacan para decir que la comedia tiene en su centro el significante fálico, oculto en tanto significante de la vida, de la falta y el deseo, o presente como en la comedia antigua.
El último de los invitados, Daniel Dalmaroni, comienza haciendo alusión a una de sus obras para ilustrar a un padre humillado. Luego explica que el humor negro consiste en hacer humor sobre aquello que no puede hacerse humor. Menciona que la forma en la que él realiza humor negro está sustentada en una lógica infantil: aquella que no tiene filtros.
Daniel recorre múltiples y diversos temas utilizando la ironía y la agudeza. El estilo de su enunciación provocó, en reiteradas ocasiones, un efecto cómico en la sala. Por mi parte, me recordó aquello de que los artistas nos llevan la delantera y que, frente a esto, al analista le conviene la posición de dejarse enseñar.
Las preguntas de la sala se orientaron en torno a recuperar algún fragmento de la ponencia de cada uno de los invitados dando lugar a un intercambio fecundo y apasionante.
La noche llega a su epílogo con una sala llena de principio a fin, entre calurosos y emotivos aplausos, confirmando que se trató de un trabajo no solo epistémico sino también libidinal.