Noche de biblioteca
Reseña Actividad 27 de Junio de 2014, EOL Sección La Plata
El secretario de Biblioteca, Carlos Jurado, hace la presentación de la película subrayando la importancia de su proyección para la sección de la EOL de La Plata. Destaca cómo Miller, respondiendo a una invitación de la escritora Christine Angot, acepta hablar de su novela, y con ello, en acto hace un cruce entre psicoanálisis y cultura. Luego, la actual Directora de la EOL, Silvia Baudini ‑quien realizó la traducción del video‑ subrayó que es una clase magistral que señala una orientación esencial para los analistas de nuestro tiempo : soportar y estar disponibles para «lo nuevo».
Miller sugiere una lectura del libro «Una semana de vacaciones» como una demostración de lo intolerable del padre.
Se dice: ¿por qué el padre es la herida y el cuchillo? Es lo que hoy nos moviliza y fue la pregunta que anticipó Lacan: cómo desembarazarnos del padre.
Propone el Seminario 6, en el que Lacan consagra su atención al deseo y su interpretación. Qué muestra? Que el deseo no es función de armonía, ni orientación. Es fuera de norma. Para Lacan, el padre es un síntoma. En ese Seminario, dedica siete clases a Hamlet, y demuestra que el deseo del padre, debe interpretarse como pére-versión. La palabra del padre es el síntoma de Hamlet y su deseo está capturado allí. Pére-versión, un término clínico en Lacan, supone que todo deseo tiene un núcleo perverso.
En la novela se va más allá del pudor, se está en la zona del síntoma, la vergüenza y el asco. Es palpable el clivaje entre deseo y goce.
El goce da una brújula infalible a quién desprecia el deseo, dice; por el contrario, el deseo desconcierta. Necesita de artificios en la especie humana, es allí donde los discursos nos proveen orientaciones. Entonces, estas brújulas que son los discursos, hasta una época reciente indicaban un mismo norte: el padre.
La declinación comenzó hace un tiempo y no se va a detener. Sostiene que vivimos una época formidable.
El Edipo, postulado como una vía normalizada del deseo, aparece tanto en «Hamlet» como en «Una semana de vacaciones» en la faz patologizante que encierra.
Concluye transmitiendo que el momento actual es apasionante y que, como analistas, «la nostalgia de otros tiempos» nos pondría en la vía de negar lo que es evidente; más bien hay que admitir lo que efectivamente sucede, para moderar en todo caso.
Brígida Griffin